En primer debate, Cámara de Representantes aprobó polémica ley sobre transfuguismo

Esta legislación permitiría que los congresistas puedan cambiar de un partido a otro sin recibir sanciones.

Política

24 de abril

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En las últimas horas, la Comisión I de la Cámara de Representantes aprobó, en primer debate, el proyecto de ley que permite a los congresistas cambiar de partido por una sola vez y sin perder su curul. Esta práctica se denomina transfuguismo y ha causado revuelo por parte de algunos parlamentarios, ya que consideran que busca destruir a los partidos de oposición, a independientes y a minorías políticas.

Esta iniciativa -presentada por los representantes Marelen Castillo (excandidata a la vicepresidencia) y Miguel Polo Polo- busca que se no se sancione por doble militancia a los congresistas que quieran inscribirse a otro partido, movimiento político o grupo significativo de ciudadanos. De igual forma, esta ha sido apoyada por el expresidente de la Cámara David Racero y por la bancada del Pacto Histórico.

“Sin perjuicio de lo dispuesto por el artículo 134, dentro de los cuatro meses siguientes a la entrada en vigencia del presente acto legislativo, autorícese, por una sola vez, a los miembros de los Cuerpos Colegiados de elección popular, o a quienes hubieren renunciado a su curul con anterioridad, a inscribirse en un partido o movimiento político distinto al que los avaló, sin renunciar a la curul o incurrir en doble militancia”, indica el proyecto.

Frente a este proyecto, la Misión de Observación Electoral (MOE) acusó que el transfuguismo político es una forma de deslealtad democrática y vulnera la disciplina al interior de las organizaciones políticas y obstaculiza su fortalecimiento. De igual forma, recordó que la Corte Constitucional ha condenado esta práctica, ya que busca fortalecer la democracia representativa y respetar la voluntad popular de los electores.

Además de la MOE, la corporación Transparencia por Colombia (Tpc) criticó la iniciativa: “El transfuguismo es un engaño al elector que votó y depositó su confianza en un candidato inscrito en una lista y representando una postura política específica. El cambio repentino va en contravía de ese voto ciudadano expresado en las urnas”.

Cabe recordar que para que esta iniciativa se vuelva ley, es necesario que pase por ocho debates (cuatro en Cámara y cuatro en Senado).